El Departamento de Estado de los Estados Unidos, el mismo que confecciona la lista de países patrocinadores del terrorismo, incluyó a Cuba en una lista de “países que concitan especial preocupación por haber perpetrado o tolerado violaciones particularmente graves de la libertad religiosa”, de acuerdo a una declaración del jueves 4 de enero, emitida por el secretario de Estado Antony J. Blinken.
El resto de países señalados por este departamento incluye también a Nicaragua, Birmania, la República Popular China, la República Popular Democrática de Corea (RPDC), Eritrea, Irán, Pakistán, Rusia, Arabia Saudita, Tayikistán y Turkmenistán.
El secretario de Estado aseveró que estos países no han contribuido a “promover la libertad de religión o credo”, más bien, todo lo contrario. Según Blinken, la libertad religiosa “ha sido un objetivo central de la política exterior de Estados Unidos desde que el Congreso aprobó y promulgó la Ley sobre Libertad Religiosa Internacional en 1998”.
Sin embargo, de acuerdo a lo declarado en X (antes Twitter) por el Canciller Bruno Rodríguez Parrilla, la ubicación de Cuba en esta lista es una necesidad del gobierno de Estados Unidos de “justificar sus medidas inhumanas de cerco y guerra económica contra pueblo cubano”.
De acuerdo a La Gaceta de la Iberoesfera, la gran mayoría de los devotos en Cuba cree que la represión gubernamental se debe a dos motivos: "o bien porque tienen una postura política basada en su fe, o bien porque hablan públicamente de su fe. En ambos casos se evidencia el intento por parte de las autoridades de recluir la religión al ámbito privado de cada ciudadano."
Los "aliados" de Cuba también persiguen a los religiosos
El gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua enfrenta acusaciones que lo señalan por perseguir y pretender debilitar a la Iglesia católica en el país. Dichas acusaciones surgieron tras la sentencia a más de 26 años de prisión para el obispo Rolando Álvarez, quien ha estado detenido desde agosto de 2022.
La incertidumbre rodea el paradero de otro obispo, 14 sacerdotes y dos seminaristas, quienes fueron arrestados durante redadas policiales llevadas a cabo en diciembre pasado.
China y Rusia, dos aliados de La Habana, también presentan un extenso historial de violación de la libertad religiosa. Según un informe de 2022, "Desde abril de 2017, más de un millón de uigures, kazajos étnicos, kirguises y otros han sido detenidos en campos de internamiento en la ciudad china Xinjiang", muchos de ellos por motivos religiosos.
En cuanto a Rusia, es conocida que en 2016 fue aprobada la ley Yarovaya, “que prohíbe predicar y distribuir literatura religiosa en la vía pública”. Asimismo, es bien conocida la persecución a los Testigos de Jehová en ese país, acosados e intimidados constantemente por las autoridades.