El artista cubano Luis Manuel Otero Alcántara, líder del Movimiento San Isidro (MSI), informó ayer en una llamada telefónica desde la cárcel de máxima seguridad de Guanajay, donde se encuentra recluido, que se plantó en huelga de hambre desde el pasado 1 de febrero, a la que posteriormente añadió la negativa a ingerir líquidos.
La activista y curadora de arte cubano Claudia Genlui, integrante del MSI, recibió una llamada telefónica del prisionero político este martes, tras la cual hizo pública la información en sus redes sociales: “Acabo de hablar con Luis Manuel Otero. Su voz estaba entrecortada. Apenas podía hablar. Luis está en huelga de hambre desde hace siete días y ha incorporado, hace unos días, la de sed”.
“La Seguridad del Estado ignora una vez más su condición de huelguista. Y conscientes del estado de salud delicado de Luis, quien ha protagonizado varias huelgas en prisión, no escuchan su principal exigencia: su libertad”, agregó la integrante del MSI.
Genlui también dijo sentir temor por la vida de Otero Alcántara: “Temo que su cuerpo no resista otra huelga y las consecuencias sen peores que la última parálisis que le dio por la huelga anterior”, escribió.
En una publicación posterior, la curadora de arte recordó que Otero Alcántara “lleva mucho tiempo siendo acosado y maltratado por parte de la Seguridad del Estado en la prisión” y “recibe un trato diferenciado donde le son negados los derechos que como preso tiene”.
Sobre su derecho a realizar llamadas telefónicas, explicó que “el 31 de diciembre de 2022, cuando todo el penitenciario de Guanajay llamó, a él se lo prohibieron. Lo mismo ocurrió el 14 de febrero pasado. Tampoco le permiten llamar en los cumpleaños de sus familiares y amigos cercanos. Y las llamadas son solo de diez minutos, dos veces a la semana, a diferencia de otros presos que si tienen más posibilidades”.
De acuerdo con Genlui, las autoridades del penal “han dicho en reiteradas ocasiones que no le van a dar su libertad condicional”.
“Luis desde el 31 de diciembre decidió no comer más la comida de la prisión y solo come lo que le lleva su familia. La Seguridad del Estado ha ignorado que él subsiste solo a base de dulces y galletas y que su cuerpo se ha ido consumiendo y que se encuentra en extremo delgado”, agregó la activista cubana exiliada en Miami.
Esta es la quinta huelga de hambre que realiza Otero Alcántara, y todavía presenta secuelas de las anteriores.
“Luis no recurre a la huelga nuevamente porque no quiera vivir, o porque esté en un momento de crisis. Luis está siendo violentado constantemente, y torturado sicológicamente. Fuerzan su aislamiento completo del mundo pese a que ya se encuentra en una prisión”, denunció Genlui.
Otero Alcántara está en prisión desde el 11 de julio de 2021, cuando desapareció tras anunciar que saldría a la calle para unirse a las protestas antigubernamentales que sacudieron el país ese día.
Un año después de su captura, el régimen anunció que Otero Alcántara fue sentenciado a cinco años de cárcel por los delitos de ultraje a los símbolos de la patria, desacato y desórdenes públicos, mientras el rapero e integrante del MSI Maykel “Osorbo” fue condenado a nueve años por los delitos de desacato, atentado, desórdenes públicos y difamación de las instituciones y organizaciones, héroes y mártires en el mismo juicio.
Este año la prestigiosa ONG Freedom House seleccionó a ambos integrantes del MSI como parte de la campaña internacional por la liberación de los prisioneros políticos llamada “Libertad para todos”.
Obras de Otero Alcántara serán expuestas en el marco del Foro Intemperie 2 que organizan las revistas Árbol Invertido y Alas Tensas entre el 23 y el 25 de febrero en Madrid, coincidiendo con la feria de arte ARCOmadrid.