Un informe realizado por el fiscal especial estadounidense Robert Hur, quien ha estado a cargo del caso relacionados con el uso indebido de documentos clasificados por Joe Biden, reveló que el presidente estadounidense de 81 años de edad tiene importantes lagunas mentales.
De hecho, el informe realizado por el fiscal, que descarta presentar una acusación contra el mandatario, deja entrever que el atenuante para impedir su condena podría ser su “incapacidad mental”.
Entre los datos más reveladores mencionados en el informe del fiscal, que tiene más de 388 páginas, se encuentra que durante las entrevistas realizadas a Biden este fue incapaz de recordar las fechas de sucesos significativos y relativamente recientes como el fallecimiento de su hijo en 2015 y su vicepresidencia del 2009 al 2017.
El resultado de la investigación, aunque libra a Biden de una imputación, es un duro golpe para su campaña electoral, pues justamente su edad y los constantes errores que comete han sido algunos de los argumentos más utilizados por sus rivales políticos.
Biden confunde a los presidentes de México y Egipto
Los abogados de Biden, por su parte, contestaron tras la publicación del informe que en este se tergiversaba lo ocurrido, y lo calificaron como “incendiario”. Cabe destacar que el fiscal especial estadounidense Robert Hur, líder de la investigación, fue nombrado en su día por Donald Trump.
Sin embargo, este viernes, en su primera comparecencia pública tras la publicación de los resultados de la investigación, Joe Biden volvió a cometer un error que le podría costar caro en las elecciones, pues tras rechazar las alegaciones del fiscal confundió a los presidentes de México y Egipto.
En concreto, cuando estaba a punto de abandonar el estrado una periodista le preguntó sobre el conflicto en Gaza, a lo que contestó que “la respuesta en la Franja de Gaza ha sido desmesurada”, una de sus mayores críticas públicas a los ataques israelíes, y añadió que “el presidente de México, Al Sisi (en referencia al de Egipto), no quería abrir la puerta para que entrase ayuda humanitaria”.
Antes de cometer este desliz Biden había realizado una conferencia en la que se le vio bastante enfadado con los resultados del informe presentado por el fiscal, donde dijo que lo retrataron como “un anciano con mala memoria”.
Biden también se mostró muy conmovido al hablar sobre la muerte de su hijo, ante lo que reclamó: “¿Cómo diablos (el fiscal) se atreve a plantear eso? Francamente, cuando me hicieron la pregunta, pensé que no era de su maldita incumbencia (...). No necesito que nadie me recuerde cuándo murió”.
Luego mostró un rosario de su hijo Beau, fallecido en 2015 por un cáncer cerebral, que dijo llevar siempre consigo en memoria del joven, al que aseguró que recuerda permanentemente.
La edad de Joe Biden, quien es a sus 81 años el presidente de más longevo de la historia de Estados Unidos, ha sido una de sus principales debilidades de cara a las elecciones de noviembre de este año, donde sus posibilidades de vencer a Donald Trump se acortan cada vez más.
Además, a lo largo de su mandato el líder del Partido Demócrata ha tenido numerosos deslices tanto en sus discursos como en los desplazamientos por los espacios que visita. También se han documentado numerosos resbalones y caídas.