La prensa oficial cubana informó esta mañana sobre el fallecimiento de una de las rescatistas que trabajaban en las labores de evacuación del edificio ubicado en Lamparillas 368, en La Habana Vieja, que sufrió derrumbes parciales esta madrugada, mientras otras dos personas continúan atrapadas entre los escombros del inmueble.
De acuerdo con la información divulgada esta madrugada, el edificio sufrió un primer derrumbe durante la noche del martes, pero poco después, cuando un grupo de bomberos y rescatistas trabajaban dentro del inmueble para evacuar a los vecinos que permanecían dentro, tuvo lugar un segundo derrumbe.
En imágenes publicadas en las redes sociales se puede observar cuando cae un pedazo del techo y de la pared de la última planta, mientras se observa a un grupo de bomberos entrando a la planta baja, los cuales tuvieron que correr para salvar sus vidas.
Según el intendente de La Habana Vieja, llamado Alexis Acosta Silva, en la edificación vivían 13 núcleos familiares, para un total de 54 vecinos. En este momento otras dos personas que resultaron lesionadas están siendo atendidas en el hospital Calixto García.
El gobernante cubano, Miguel Díaz-Canel, se refirió esta mañana en su cuenta de X al derrumbe, donde dijo lamentar el fallecimiento de la rescatista.
Actualmente siguen las labores de búsqueda de las dos personas que se encuentran atrapadas en el inmueble, según confirmó el primer coronel Luis Carlos Guzmán Matos, jefe del Cuerpo de Bomberos de Cuba.
En Cuba cada año mueren personas debido a los derrumbes de sus viviendas, especialmente en las zonas más antiguas del país, como es el caso de La Habana Vieja, debido al escaso mantenimiento que reciben los inmuebles.
Decenas de miles de personas viven en viviendas que no están aptas para ser habitadas debido a problemas contractivos y estructurales. Mientras tanto, el Gobierno decide mirar hacia otro lado y destina la mayor parte de sus recursos a la construcción de hoteles.