Según la ministra de Educación en Cuba, Naima Trujillo, el déficit de profesores en el país se ubica en un un 12,15%. Esto significa que la Isla enfrenta el curso escolar 2024-2025 con alrededor de 24 mil profesores menos de la cantidad que necesita.
De acuerdo con un reporte de la Agencia EFE, esta escasez afecta sobre todo a las provincias de Mayabeque, Matanzas, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila y Camagüey, aunque es notoria en toda Cuba.
Además de la falta de profesores y la crisis alimentaria, la insuficiencia de libros de texto, libretas, uniformes y otros insumos escolares hacen que cada año sea más difícil afrontar el inicio del curso escolar en la Isla.
Después de la pandemia de COVID-19, el sistema educativo en Cuba enfrentó una crisis significativa. La falta de recursos tecnológicos dificultó la implementación efectiva de la educación a distancia, lo que amplió la brecha educativa entre los estudiantes con y sin acceso a tecnología.
A esto se suman las continuas carencias de infraestructura y materiales didácticos, así como la emigración de profesionales, incluidos maestros, en busca de mejores condiciones de vida y empleo en el extranjero, dejando aulas desatendidas y a estudiantes sin apoyo académico.