El legendario lanzador cubano Luis Tiant falleció este lunes a los 83 años de edad tras enfrentar problemas de salud en los últimos meses, según informaron las Grandes Ligas en su página web.
Tiant, conocido como "El Tiante", nació el 23 de noviembre de 1940 en Marianao, La Habana, donde creció bajo la sombra de su padre, Luis Eleuterio Tiant Bravo, quien fue también un legendario lanzador en el béisbol cubano entre los años 20 y 40 del pasado siglo.
Con tan solo 16 años, su habilidad en el montículo lo llevó a ser descubierto por el mexicano Beto Ávila, quien lo llevó a jugar en la Liga Mexicana, iniciando una carrera profesional que lo llevó poco tiempo después a las Grandes Ligas, donde lanzó durante 19 temporadas entre 1964 y 1973.
En las Ligas Mayores integró los equipos de Cleveland, Boston, Minnesota, Yankees, Pittsburgh y Angelinos. A lo largo de su carrera consiguió 229 victorias, ponchó a 2.416 bateadores y mantuvo una impresionante efectividad de 3.30, por lo que fue seleccionado para tres Juegos de Estrellas.
Un estilo único
Además, el lanzador cubano ganó dos títulos de efectividad y logró culminar 49 juegos sin que le anotaran carreras. No obstante, más allá de sus resultados, fue su particular estilo de pitcheo, marcado por extravagantes giros y torsiones, lo que lo convirtió en una atracción dentro y fuera del campo para los fanáticos.
De todos los equipos donde militó tuvo una relación más estrecha con los seguidores de los Medias Rojas de Boston, quienes lo convirtieron en un ídolo tras llevar al equipo a conquistar la Serie Mundial de 1975.
Pero para Tiant no todo fueron alegrías, pues tras su salida al exilio en 1961 no pudo regresar a Cuba ni ver a sus padres durante 14 años. Al conversar sobre ello con el periodista cubano Francys Romero lamentó que “ese tiempo no lo regresa nadie”.
Aunque nunca fue incluido en el Salón de la Fama, su compatriota Tony Oliva, quien sí recibió ese honor en 2022, lo mencionó como uno de los grandes que también debería haber estado allí. Su legado ha trascendido los premios y las estadísticas, ya que fue uno de los protagonistas de una época dorada para los jugadores cubanos en las Grandes Ligas.