Las autoridades rusas informaron este viernes que el líder opositor Alexei Navalni murió en la prisión de Jarp, situada en los Urales y a 60 kilómetros al norte del Círculo Polar Ártico, donde cumplía una condena de 30 años de privación de libertad.
La agencia de prensa RIA Novosti dijo que el opositor se sintió mal después de una caminata y perdió el conocimiento. Moscú no ha dado más detalles sobre el fallecimiento del opositor, quien fue envenenado por órdenes del Kremlin en el año 2020 y encarcelado tras su regreso a Rusia en febrero de 2021.
Navalni era el principal líder de la oposición en Rusia, un país donde se han vuelto cada vez más frecuentes los asesinatos extrajudiciales a figuras que cuestionan el poder absoluto de Vladimir Putin.
Navalni había destacado especialmente por sus investigaciones sobre la corrupción del Gobierno de Vladimir Putin. Por ese motivo fue envenenado con el agente químico Novichok en el año 2020 cuando se encontraba en Berlín.
Tras un lento proceso de recuperación del envenenamiento que casi le cuesta la vida, el opositor decidió volver a Rusia, aun sabiendo las amenazas que se cernían sobre su persona, que se materializaron inmediatamente con su arresto y envío a prisión nada más aterrizar en Moscú.
A finales de 2023, tras tres semanas sin noticias suyas, sus familiares, colaboradores y abogados supieron que había sido trasladado a la colonia penal IK-3 de Jarp, en la región de Yamal-Nenets, un centro penitenciario fundado en la década de 1960 como parte del sistema de gulags dedicados al trabajo forzado de los prisioneros en la época soviética.
Sus abogados han denunciado numerosos malos tratos y torturas durante los más de dos años que permaneció en prisión el opositor ruso, quien ha sido llevado a una celda de castigo en 27 ocasiones durante este tiempo, la última de ellas este 14 de febrero.
Actualmente el opositor se encontraba cumpliendo una condena de 30 años de cárcel, pues fue sancionado a nueve años en marzo de 2022 por un caso de fraude que sus seguidores califican como “fabricado” por Putin, a lo que añadieron una condena de 19 años por “apoyar el extremismo” y otra de dos años y medio por el presunto desvío de fondos en otro caso que se remonta al 2013.
La Unión Europea (UE) señaló este viernes al Gobierno de Vladimir Putin como responsable de la muerte del opositor político, según afirmó el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, en X (antes Twitter).
También Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, expresó al conocer la noticia de la muerte de Navalni que “Putin no teme más que la disidencia de su propio pueblo. Un sombrío recordatorio de lo que son Putin y su régimen”.
El secretario de Estado de EEUU, Anthony Blinken, dijo al respecto que la muerte del opositor “en una prisión rusa y la obsesión y el miedo de un hombre solo subrayan la debilidad y la podredumbre en el corazón del sistema que ha construido Putin. Rusia es responsable de esto”.
La esposa de Navanli, quien se encontraba este viernes cuando se dio a conocer la información en la Conferencia de Seguridad de Múnich, un importante foro que reúne a líderes políticos, militares y diplomáticos de todo el mundo, se dirigió a los presentes y expresó que “en mi lugar, en este momento, Alexei habría decidido subirse a este escenario”.
“No sé si debemos creer a las terribles noticias que recibimos solo de medios oficiales. Durante muchos años, han mentido constantemente. Pero si es la verdad, quiero que Putin y su equipo sepan que serán castigados por lo que han hecho a nuestro país y a mí familia. Serán llevados ante la justicia. Ese día llegará pronto. Llamo a toda la comunidad internacional a unirse, combatir esta maldad, este régimen horrible”, añadió la esposa del fallecido opositor.