Un grupo de 24 artistas cubanos publicó una carta abierta en la revista Hyperallergic emplazando a sus homólogos extranjeros a posicionarse ante la represión en la Isla, a propósito del anuncio de Havana Art Weekend, un evento que tendrá lugar en el mes de noviembre como prólogo de la Bienal de La Habana con el propósito de blanquear la censura en Cuba.
El texto, firmado por artistas como Tania Bruguera, Coco Fusco y Hamlet Lavastida, sugiere el boicot de los eventos culturales patrocinados por el Gobierno cubano dada la represión y censura que aplica sobre los artistas, además del uso de este tipo de eventos para impactar en la opinión pública internacional.
“En lugar de garantizar la libertad de expresión de los cubanos, la presencia de personalidades extranjeras del mundo del arte contribuye a sostener el mito de la revolución cubana como proveedora de cultura”, escribieron los artistas, en referencia a eventos como el Havana Art Weekend.
En ese sentido, pidieron que los creadores extranjeros “reconozcan que la represión de los artistas es llevada a cabo por los mismos burócratas culturales que les dan la bienvenida a la isla, les presentan a un selecto número de artistas de confianza y organizan sus visitas a las galerías de arte estatales”.
El texto, que actualmente acumula más de 200 firmas, señaló que el Havana Art Weekend tiene como objetivo “atraer a la isla a artistas extranjeros y, con ellos, a posibles inversores, a fin de ofrecerles una idea de lo que podrán ver en la bienal de arte del próximo año”.
Los firmantes también cuestionaron el trato dispar del Ministerio de Cultura a los artistas cubanos respecto a empresas internacionales, como puede ser la Galería Continua, a la cual permite operar en la Isla mientras prohíbe la creación de espacios semejantes a los propios cubanos.
“Del mismo modo que el gobierno cubano entabló amistad con famosos intelectuales latinoamericanos en la década de 1960 a fin de romper el aislamiento diplomático de la isla, ahora el Ministerio de Cultura se esfuerza por atraer a otra claque de figuras de alto nivel a las que persuadir de prestar su apoyo y atraer divisas a una economía que está al borde del colapso”, señalaron.
Además, insistieron en que “el gobierno cubano siempre ha utilizado el trabajo cultural para crear la impresión entre los extranjeros de que el Estado es benévolo y apoya la cultura”, a la vez que mencionaron numerosos actos de represión contra artistas independientes, de los cuales varios se encuentran en prisión.
“Los extranjeros tienen la libertad de elegir sin coacciones y la posibilidad de informarse sobre las condiciones en las que los cubanos están obligados a vivir. Les pedimos que lo hagan antes de caer en la trasnochada narrativa del tiempo de la Guerra Fría que presenta a Cuba como víctima de la agresión imperialista”, escribieron.
“En nombre de la justicia para nuestros compatriotas injustamente encarcelados, pedimos que los extranjeros no cooperen con eventos culturales patrocinados por el Estado hasta que todos los cubanos de la isla sean libres”, finaliza la carta.
Durante la última década los artistas cubanos han tenido protagonismo en la lucha cívica contra la dictadura cubana, lo que ha provocado el incremento de la represión del régimen hacia dicha comunidad, materializándose con la censura, la cárcel y el exilio.
Como resultado del clima de confrontación entre el régimen y una parte de la comunidad artística cubana, decenas de creadores cubanos y extranjeros rechazaron participar en la XIV Bienal de La Habana, inaugurada en noviembre del pasado año.