Reyna Yacnara Barreto Batista, joven camagüeyana detenida por participar en las protestas antigubernamentales del 11 de julio de 2021 (11J), se convirtió en la primera prisionera política liberada tras el anuncio del régimen cubano de excarcelar a 553 reclusos.
Su madre, Reyna Luiza Batista Silva, confirmó la noticia al publicar una fotografía junto a su hija en redes sociales, expresando su alegría: "Feliz mi hija de libertad. Gracias, mi Dios, por darme esta alegría. Gracias a mi familia, a mis hijos, a mis amigos y a todas aquellas personas que nunca nos dieron la espalda. Fue el primer juicio celebrado en Cuba entera de los participantes del 11J y ahora es la primera mujer en gozar de los nuevos cambios que se acercan."
Barreto Batista, quien tenía 21 años al momento de su arresto, fue condenada en Camagüey a cuatro años de trabajo correccional con internamiento, bajo cargos de “desorden público” y “atentado”.
En el caso de Barreto Batista, el régimen utilizó como prueba en su contra un video donde se veía su enfrentamiento con tres policías que buscaban neutralizarla durante las protestas. En el material, uno de los oficiales llega a patearla en la pierna, lo que en lugar de servir como evidencia de su inocencia y del uso excesivo de la fuerza por parte de las autoridades, fue empleado para justificar los cargos en su contra.
Recordamos que en Cuba hay 1.161 presos políticos al cierre de 2024, según Prisoners Defenders, de los cuales 648 sufren patologías médicas causadas y/o agravadas por el maltrato en prisión. El gobierno cubano, sin embargo, no reconoce la existencia de presos políticos y los clasifica como presos comunes.