En un evento sin precedentes desde 1972, una misión espacial de Estados Unidos ha conseguido alunizar este 22 de febrero, abriendo el camino hacia la futura “comercialización del espacio exterior”, según señala National Geographic.
El módulo lunar Odysseus (“Odiseo”, en español) ha alunizado en el polo sur de la Luna, lo que lo convierte en el primer éxito de magnitud del programa Artemis, organizado por la NASA y otros colaboradores. Este proyecto, heredero de las célebres misiones Apolo, tiene como objetivo encontrar el sitio y los recursos adecuados para establecer estancias humanas prolongadas en la Luna. Esta nave no está tripulada, sino que es controlada desde la Tierra.
El viaje de “Odie” (como le llaman a la nave) está diseñado para inspeccionar el ambiente lunar en el polo sur, en un intento por localizar un terreno adecuado que pueda recibir una misión tripulada a finales de 2026.
Odiseo fue lanzado el 15 de febrero en “un cohete Falcon 9 de SpaceX [empresa de Elon Musk] y cuenta con un nuevo tipo de sistema de propulsión de oxígeno líquido superenfriado y metano líquido que le permitió surcar el espacio en tiempo récord”, afirma el medio Infobae.
Según el diario Los Angeles Times, Steve Altemus, director general de Intuitive Machines, una de las compañías que colaboran con la NASA en esta misión , declaró lo siguiente: “Sé que esto fue complicado, pero estamos en la superficie y estamos transmitiendo. Bienvenidos a la Luna”.
“Houston, Odiseo tiene un nuevo hogar”, ha sido la frase de Steve Altemus que le ha devuelto la calma a su equipo.
La nave “se encuentra en posición vertical y empieza a enviar datos", ha confirmado Altemus, después de varias horas de tensión en las que se pensó que la misión había fracasado.
Intuitive Machines ha marcado un hito al ser la primera empresa privada en participar en un alunizaje. En un intento similar, Astrobotic Technology, otra firma estadounidense, no logró su objetivo a comienzos de 2024 sin éxito, ya que su sonda se estrelló contra la tierra.
Estas dos compañías son participantes de una iniciativa de la NASA destinada a fomentar la economía lunar.
Asimismo, fue revelado que la pequeña nave contó con otros “tripulantes”. De acuerdo con Los Angeles Times, la marca de ropa deportiva Columbia Sportswear envió “su más reciente tela aislante para chaquetas”, mientras que el escultor Jeff Koons, hizo lo propio para llevar “125 pequeñas figuras de la Luna”.