Luis Ángel Ríos Cala, de 45 años, fue arrestado este lunes 16 de septiembre por la Policía de Aguacate, poblado en Santiago de Cuba, tras un comentario en un velorio. En esta misma localidad (de poco más de 1300 habitantes) han sido cometidos otros tres asesinatos en menos de un año, algo que deja muy mal parados a los oficiales locales.
Según las autoridades, Ríos Cala declaró que en Aguacate, si hubiera justicia, no habría tantos asesinatos. Para recuperar su libertad debe pagar una fianza astronómica que asciende a los 100 mil pesos cubanos, equivalente a 312 USD según el cambio promedio de septiembre de 2024, algo que pudiera cambiar en cualquier momento.
Luis Ángel expresó su inconformidad con las autoridades de Aguacate en el entierro de Arianni Céspedes, quien fue asesinada el sábado 14 de septiembre por su ex pareja. Los hijos de una vecina, de 5 y 6 años, fueron testigos del crimen. Con este feminicidio ya suman 35 en lo que va de 2024, según el Observatorio de Género de Alas Tensas (OGAT), cifra menor a la del año pasado, pero todavía alarmante, a razón de más de uno por semana.
Ríos Cala, por su parte, también lamentó la muerte de su primo Jorge Luis Heredia Cala, asesinado en marzo de este 2024. A pesar de que el asesino (un vecino apodado Tatico, amigo de la víctima) confesó haber cometido el crimen, se encuentra en libertad debido a que la policía no encontró "pruebas suficientes" para confirmar que el homicidio fue premeditado.
De acuerdo con Tatico, él solo lanzó una piedra en la noche, en un callejón oscuro y estrecho del pueblo, con el fin de matar a una lechuza. Aun así, la piedra le golpeó la cabeza Jorge Luis, quien falleció horas después en un hospital. Según un reportaje publicado por Cibercuba, Heredia Cala fue asesinado porque conocía de un sembrado de marihuana perteneciente a Tatico, quien, de acuerdo con este medio, ha sobornado a los policías locales para que se caso no sea condenado.