¡Ricardo II llegó a Cuba! Esta obra de William Shakespeare nos exhibe el modo en que locura, pasión y ambición se complementan para solidificar el ejercicio de la política en la edad media inglesa, teniendo como móviles la lujuria, el clientelismo cortesano y los vínculos hereditarios. La puesta en escena que hoy nos regala Perséfone Teatro ofrece una visión actualizada y singular de las lecturas del poder, en particular su carácter totalitario.
La obra remite, a pesar de su escenario medieval y monárquico, a la trama de la Cuba contemporánea, exponiendo como la familia puede ser el escenario para la traición, el destierro y la hegemonía patriarcal, atravesado por el erotismo siempre recurrente en las puestas en escena de Adonis Milán.
El proceso de montaje de la pieza teatral también fue una condicionante para el producto cultural final que hoy disfrutan nuestros espectadores: el acoso de la Seguridad del Estado sobre el director, el asesor histórico y los actores, influyeron en la construcción colectiva del enfoque sobre la sucesión hereditaria y su círculo cortesano que la obra manifiesta, trastocando lo medieval con lo estalinista.
Otro elemento contextual es el reflejo del mundo de los afectos en su dimensión intergeneracional, ya abordado por Shakespeare desde el siglo XVI, pero que adquiere un enfoque particular en la reflexión de los protagonistas sobre los personajes, así como en su proyección escénica.
Se debe precisar que la mayoría de los actores pertenecen a la generación posterior a los años noventa del pasado siglo. Este grupo poblacional en Cuba se distingue por tener que enfrentar en su vida cotidiana una constante ruptura con la generación de sus padres: unida por un extraño lazo al totalitarismo caribeño u obligados al silencio por las condenas judiciales del post 11 J.
Tratamiento y caracterización de los personajes
En cuanto al tratamiento y caracterización de los personajes, atravesados por la visión a veces de hiperbolizada del discurso sexual del director, mostrando una mirada libérrima del texto de William Shakespeare pero que mantiene los parlamentos en fiel apego al texto. Milán maneja temas polémicos desde el Medioevo hasta la Modernidad, entre ellos el incesto.
Con estos abordajes se pretenden crear rupturas tanto en proceso creativo como en la reflexión del público que asiste a la obra. La construcción de un discurso homoerótico asociado al poder también resulta una imbricación de la condición sexual de varios monarcas del Medioevo inglés con el discurso teatral de la compañía, que a su vez intenta deconstruir los cánones heteronormativos impuestos por la moral castrista tradicional.
La presencia de la mujer
La presencia de la mujer en esta pieza dramática es uno de sus rasgos sui generis, pues nos presenta al sujeto relegado por la monarquía medieval, que se ve obligada por la ruptura de sus afectos a tomar una actitud desafiante y pasar de la sumisión al ejercicio inteligente y pasional de la política.
"...esta puesta en escena es una muestra de que, a pesar de la represión y el ciclo migratorio, el teatro independiente sigue vivo en Cuba"
Esta obra recrea la dimensión cíclica de la historia, pues el escenario puede ser distinto en cuanto a su construcción política, económica, social y política. En cambio, la dimensión ideológica y hegemónica del ejercicio del poder se adapta tomando de las nuevas expresiones, combinando lo actual y lo viejo, con el fin de aniquilar, transformar y por su puesto amar lo más frágil de la condición humana.
Un aspecto importante se basa en que esta puesta en escena es una muestra de que, a pesar de la represión y el ciclo migratorio, el teatro independiente sigue vivo en Cuba.
Además, para su montaje se construyeron nexos con emprendedores, instituciones de la sociedad civil o espacios educativos enfocados en la educación complementaria. Este largo proceso de creación que supe crecerse ante las crisis y los tantos bloqueos internos, nos demostró que aún en más hostil de los contextos se puede ofrecer un espacio cultural disidente a la ciudadanía.
Proyección de la documentación del drama histórico Ricardo II, de William Shakespeare, una puesta en escena de Perséfone Teatro en Madrid, España.
Fecha y hora: Sábado 8 de octubre / 3:00 pm
Ubicación: sede de la editorial Ediciones Deslinde, calle Paredes de Nava, 31, 28017 Madrid.
ENTRADA GRATUITA
Si estás por Madrid no te pierdas la oportunidad de ver teatro independiente cubano y participar en una charla con su director Adonis Milán y con el asesor histórico Leo Fernández Otaño.