El escritor y humorista cubano Enrique Del Risco publicó una carta abierta rechazando la “campaña de acoso y descrédito” emprendida por las autoridades cubanas contra el humorista Jorge Fernández Era, que ha llegado hasta la imposición de medidas como “prisión domiciliara” y la prohibición arbitraria de salida del país.
El texto, divulgado por Del Risco a través de la plataforma change.org el pasado 1 de julio, ya cuenta con más de un centenar de firmantes, entre los que se encuentran destacados humoristas como Ulises Toirac, Alexis Valdés, Rigoberto Ferrera, Nelson Gudín, Iván Camejo, Omar Franco, Alen Lauzán y Conrado Cogle (Boncó Quiñongo), entre otros.
También otras figuras de la cultura cubana sumaron su firma a la carta, como es el caso del escritor Antonio José Ponte, el Premio Nacional de Artes Plásticas Lázaro Saavedra, los cienastas Pavel Giroud, Ian Padrón y Rolando Díaz, así como los actores Roberto San Martín y Olivia Sofía Manrufo.
Los firmantes calificaron a Fernández Era como “una referencia para el humor cubano durante cuatro décadas” y recordaron que ha sido “galardonado con numerosos premios nacionales e internacionales a lo largo de carrera”.
Pese a ello, denunciaron que “el escritor ha sido excluido en todos los medios con los que colaboraba, se le ha prohibido viajar al exterior y encima se le ha condenado a un año de arresto domiciliario por el simple delito de satirizar la realidad cubana”.
Por ese motivo, los firmantes denunciaron que, pese a que el humorista no ha hecho más que satirizar la realidad cubana, los gobernantes de la Isla no han complido con su deber, enfocado en “arreglar lo que no funciona en su país, sin hostigar a los que intentan hacer reír con lo que funciona mal, tarea tan difícil que lo que merece es un premio”.
“Se nos dirá que con la prisión domiciliaria se le evita a Fernández Era entrar en contacto con una realidad que tanto le incomoda, pero tenemos entendido que el escritor es mayor de edad y debe permitírsele salir de su casa si es su deseo, aunque sea para tropezarse con todo lo que no parece agradarle”, dijeron los autores de la carta.
“Los humoristas son así de masoquistas, pero el masoquismo es una de las tantas opciones de las que disfrutamos los adultos. Por otra parte, creemos que, si los imperialistas y sus secuaces insisten en que en Cuba no hay derechos, está muy feo que la policía y la Seguridad del Estado le den la razón al imperialismo”, añadieron.
Los firmantes del texto exigieron “que cese inmediatamente la persecución contra un colega que no ha hecho otra cosa que cumplir con su deber como humorista y ejercer sus derechos como ciudadano”, por lo que agregaron en el mensaje dirigido a las autoridades que “si no saben en lo que consisten los deberes de un humorista y los derechos de un ciudadano, prometemos explicárselo en una nueva carta, con muchas más firmas”.
También Oswaldo Doimeadiós, Premio Nacional de Humor, envió una carta a Fernández Era solidarizándose con su situación y rechazando las sanciones impuestas en su contra por las autoridades cubanas.
“Te conozco hace treinta y cinco años y siempre has sido un tipo incómodo, pero honesto, y la honestidad es un bien preciado en estos días. Ojalá y esas medidas que se han tomado contigo, a mi juicio excesivas, sean revocadas. Cuenta conmigo para lo que necesites”, escribió Doimeadiós.
En el último año el escritor, editor y humorista cubano Jorge Fernández Era recibió varias citaciones de la Seguridad del Estado debido a sus textos satíricos sobre la realidad cubana.
También Harold Cárdenas, director de la revista La Joven Cuba, donde Fernández Era publicaba sus columnas, rechazó uno de sus textos donde criticaba a la Seguridad del Estado y la organización estadounidense Puentes de Amor, por lo que esté decidió poner fin a su relación laboral con dicho medio.
Fernández Era también ha denunciado amenazas a su hijo, quien se encuentra en prisión, para que este deje de publicar sus textos satirizando al régimen cubano.
Puede hacer clic en el siguiente enlace para acceder al texto íntegro del documento.