El fallecimiento de Félix Sánchez en Ciego de Ávila este martes 26 de julio, significa una gran pérdida para las letras de la isla.
Su legado se sostiene en un compromiso con la honestidad y con la literatura, especialmente con la narrativa breve, la literatura infantil y la promoción cultural desde su provincia natal.
Su voz, marcada por una sensibilidad crítica, un humor lúcido y una estética de lo cotidiano, deja una impronta en la tradición de la narrativa cubana.