Mientras crece la alerta climática a nivel mundial y los expertos se preguntan si es posible revertir los cambios al medio ambiente provocados por los humanos, este se ha convertido en el verano más caluroso desde que se realizan registros, rompiendo récords de temperatura en todos los continentes.
Al menos en lo que refiere al hemisferio norte, donde el verano tiene lugar en los meses de junio, julio y agosto, durante este 2023 se han superado todos los récords de altas temperaturas. En Europa, la temperatura media ha superado en 4,2 grados Celsius a la media histórica, en Norteamérica en 5,3, en Asia en 5,7 y lo más sorprendente de todos: en Siberia se superó la media en 6,1 grados.
También en los medios de prensa han sido noticia este año los 54,2 grados Celsius registrados en el Valle de la Muerte, Estados Unidos, así como los 46,3 en Licata, Italia y los 45,4 marcados en Figueres, España. Aun así, a pesar de que este ha sido el verano más caluroso de la historia, estas evidencias de la emergencia ambiental que sufre el planeta tierra no parecen suficientes para un cambio radical en las gestiones de los países que producen más contaminación.
Otro de los principales efectos que está teniendo este calentamiento recae en los mares, que han registrado una temperatura media superior a los 21 grados Celsius este verano, lo que provoca la alteración del régimen pluvial, ocasionando grandes sequías, así como lluvias torrenciales en diferentes regiones.
De acuerdo con los datos del Servicio de Cambio Climático Copernicus, el mes de julio ha sido el período más cálido desde que se realizan registros en el mundo. Tan solo en la primera y tercera semana del mes la temperatura media del planeta superó el umbral de seguridad de 1,5 grados extra sobre el nivel preindustrial.
Justamente es 1,5 grados Celsius la línea trazada por el Acuerdo de París contra el cambio climático, pues los científicos afirman que es la frontera para limitar los efectos más devastadores del calentamiento de la tierra.
Asimismo, este 6 de julio se convirtió en el día más caluroso de la historia desde que se realizan registros, con una temperatura media de más de 17 grados Celsius, mientras que desde mayo “la temperatura media de la superficie del mar ha estado muy por encima de los valores previamente observados en esta época del año”, informó el servicio de observación climático.
El verano que se vive en Cuba
Julio de este año también ha sido el mes más caluroso en Cuba desde el año 1951, con una temperatura promedio de 29,1 grados Celsius, según los registros del Centro de Clima del estatal Instituto de Meteorología de la isla.
El reporte más elevado del mes de julio en Cuba fueron los 39 grados registrados el día 22 en la estación meteorológica de Jucarito, Granma. Por su parte, 2022 fue el tercer año más caluroso en siete décadas en Cuba, con 0,88 grados Celsius de temperatura por encima del promedio.
Unido a esta emergencia global, los cubanos deben lidiar con otros conflictos particulares. La poca disponibilidad energética, que impide la existencia y/o utilización de aires acondicionados en tiendas, oficinas o centros de trabajo y favorece la generalización de los apagones, han agudizado las condiciones de vida en la Isla.
De igual forma, el Instituto de Meteorología dio a conocer que 37 estaciones en la Isla, de un total de 68 (un 54 %), reportaron temperaturas máximas de 35 grados Celsius o más durante el mes de julio.