Debido a las persistentes afectaciones en el sistema eléctrico nacional, los cubanos esperan al huracán Rafael bajo apagones de más de 20 horas diarias. Sin electricidad y sin Internet en muchos sitios, han recibido la información de manera fragmentada.
Por su parte, los aeropuertos internacionales de La Habana y Varadero, así como las terminales aéreas de Nueva Gerona y Cayo Largo del Sur, suspendieron sus operaciones por la cercanía de Rafael.
De igual foma, se supendió el servicio de ómnibus interprovinciales en todos los territorios desde Sancti Spíritus hasta Pinar del Río. Los trenes de toda esta zona y la ruta marítima Batabanó-Isla de la Juventud también fueron suspendidos.
Aun así, "se mantienen operando las salidas interprovinciales que vinculan los territorios desde Ciego de Ávila hasta la cuidad de Guantánamo en sus horarios habituales”, dijo el ministro de Transporte Eduardo Rodríguez Dávila. Estas interrupciones pueden durar mientras pase el huracán o mantenerse hasta varios días después, en dependencia de las afectaciones.