Esqueleto sin huesos,
esperpento metálico
que arañando tus aspas el aire
se te ha colgado el alma
en el espacio.
Ya no sueñas Quijotes
ni tu muela se escucha
desde el trigo.
Ya no tienes ni sueños,
y si acaso tuvieras,
soñarías cilíndricos momentos
estirando tus brazos
para atrapar silencios.
Andas acompañado
de congéneres grises,
aburridos y fríos
como aburridos muertos.
Sembradíos de osarios,
captores de energía
que suplican al cielo
un lecho de colores
para anidar sus sueños.
Parece que crece en el campo
como la espiga o el espliego,
para mí tan solo sois «ocupas»
del paisaje que veo.
Publicado originalmente en la antología Más allá del miedo es mi casa “Mujeres poetas contra la violencia” (Ediciones Deslinde, Madrid, 2021), con selección de Ivonne Sánchez-Barea e Ileana Álvarez, y prólogo de Milena Rodríguez Gutiérrez.