Varios diputados europeos se reunieron este martes 8 de junio en la sede del Parlamento Europeo (PE) en Estrasburgo, Francia, para debatir sobre derechos humanos en Cuba y la tensa situación política en la isla.
Las intervenciones de más de una decena de diplomáticos giró en torno al Acuerdo de Cooperación y Diálogo Político con la isla, firmado el 5 de agosto de 2017.
La polémica estuvo motivada por las recientes acciones represivas del régimen contra el Movimiento San Isidro (MSI) y su líder Luis Manuel Otero Alcántara, en huelga de hambre y sed y luego hospitalizado a la fuerza por las autoridades.
"Nuestros servicios han estado en contacto con él desde su liberación. Nos informó que continuará con su activismo político y nos expresó su agradecimiento con el apoyo que le ha prestado la Unión Europea. No tengan ninguna duda de que continuaremos haciendo seguimiento de su situación personal y de las peticiones de libertad de expresión artística que ha formulado el MSI", declaró al comienzo de la sesión Josep Borrell, jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), quien también expresó su preocupación por "la situación de las personas que protestaron pacíficamente en la calle Obispo de La Habana Vieja, para apoyarlo. Cinco de ellas siguen todavía detenidas, lo mismo ocurre con otros miembros del MSI".
Aunque Borrell fue uno de los pocos defensores de la continuidad del tratado, hizo saber que se han "planteado estos y otros casos con las autoridades cubanas". "El diálogo sobre derechos humanos está en el centro de nuestra relación", señaló.
... "recientemente la represión está aumentando estrepitosamente, documentándose con más de 1000 actos represivos contra periodistas y activistas de derechos humanos, contando actualmente con más de 150 presos políticos"
Leopoldo López Gil, representante del Partido Popular Europeo y padre del opositor venezolano Leopoldo López, inauguró una serie de discursos que de manera contundente rechazaron el acuerdo.
"Es lamentable que en estos años no se hayan podido constatar avances por parte del régimen cubano que pongan de manifiesto alguna voluntad para mejorar las condiciones y los derechos de sus ciudadanos. Por el contrario, recientemente la represión está aumentando estrepitosamente, documentándose con más de 1000 actos represivos contra periodistas y activistas de derechos humanos, contando actualmente con más de 150 presos políticos", denunció, antes de puntualizar cómo el gobierno de la isla impide a opositores participar en eventos internacionales, la detención de los autores de Patria y Vida —quienes sostuvieron un diálogo con el Parlamento en febrero pasado—, o el trato injusto al que son sometidos los médicos de las misiones internacionales.
Por su parte, Dita Charanzová, vice presidenta del PE, consideró que "la UE ha apoyado a los cubanos en su camino hacia la libertad durante mucho tiempo", y cuando se aprobó en 2017 el acuerdo de cooperación, apuntó, se tenían "muchas dudas". Sobre la situación real de Cuba dijo que "no podemos hablar de mejoras si hay más presos políticos hoy que hace cuatro años. No se puede negar que Cuba sea una dictadura (...) cuando el régimen detiene a periodistas, artistas y defensores de los derechos humanos".
"Cuba no está cumpliendo con sus obligaciones, se está burlando de nuestro acuerdo. Mientras tanto el pueblo cubano está sufriendo mucho y necesita nuestro apoyo".
"No tenemos un verdadero diálogo de derechos humanos si el régimen impide la participación de las ongs europeas y cubanas", estimó Charanzová, quien en reiteradas ocasiones se ha manifestado a favor de la causa de la libertad en la nación caribeña.
Al finalizar su intervención fue concluyente al afirmar que "Cuba no está cumpliendo con sus obligaciones, se está burlando de nuestro acuerdo. Mientras tanto el pueblo cubano está sufriendo mucho y necesita nuestro apoyo. Tenemos que defender nuestros valores y eso significa suspender el acuerdo con Cuba como último recurso".
Otros eurodiputados, entre ellos varios españoles, como María Soraya Rodríguez Ramos y Gabriel Mato, emitieron su criterio de retirar el acuerdo, pues, al decir de este último, "no ha servido para nada". Mientras que voces como la de Paulo Rangel, insistieron en definir a Cuba como "una de las dictaduras peores de la historia" y cuestionó el trabajo del representante de la UE en Cuba, el español Alberto Navarro.
El acuerdo entre la UE y Cuba establece un mecanismo continuado de diálogo para "el fortalecimiento de los derechos humanos y de la democracia”, así como criterios para la cooperación. Con la mayoría de los bloques legislativos a favor de continuar y mejorar el vínculo con la isla, dependerá del voto solitario de Lituania la ratificación del convenio.
Reacciones adversas
La víspera de la reunión europea la prensa estatal cubana, a través de una nota de Cubadebate reproducida en otros medios, arremetió contra el evento, considerando un "debate artificial", "farsa" y "deleznable maniobra política" la discusión sobre la situación política y los derechos humanos en Cuba, y en su habitual retórica estimaron que los diputados deberían referirse a la "violación masiva, flagrante y sistemática de los derechos humanos de toda la población cubana", como consecuencia del "genocida, inmoral e ilegal" bloqueo económico de los Estados Unidos.
"Resulta vergonzoso que un grupo de eurodiputados haya promovido la inclusión de este tema como parte de la agenda de la Eurocámara", reza el editorial de Cubadebate, que acusó de falta de "objetividad e imparcialidad" al legislativo europeo, y en su lugar, los periodistas del régimen entendieron que se trata de "selectividad y dobles raseros al examinar cuestiones relativas a los derechos humanos en un mundo tan convulso"; además de "complicidad e inmoralidad" al no tocar, según el portal digital, "temas como el racismo, la discriminación, y la creciente xenofobia presentes en Europa" y de "grosería y falta de ética extraordinarias que se escoja para criticar a Cuba".
La evidente molestia del régimen llegó a la exacerbación de tachar a los parlamentarios españoles —promotores de la iniciativa— de sentir una "común la nostalgia del franquismo y la vocación golpista", emparejada con "la misma agenda de quienes, desde Estados Unidos, han intentado derrocar a la Revolución Cubana desde hace más de 60 años".
Un discurso muy similar al emitido hace apenas una semana por la Asamblea Nacional del Poder Popular, que aseguró que los eurodiputados responden a la agenda de Washington".
Tras enlistar los supuestos logros de "la pequeña nación caribeña", el artículo amplió su crítica hasta catalogar el debate como entorpecedor de "las relaciones bilaterales entre Cuba y la Unión Europea y socavar la implementación del Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación entre Cuba, la Unión Europea y sus Estados miembros".
Sin embargo, la nota omite, ad hoc, que el Acuerdo firmado en 2017, y que convirtió a la Unión Europea en uno de los principales socios políticos y económicos de la isla, es tajante en cuanto a la violación de los derechos humanos en este territorio. El irrespeto de estos, incrementado exponencialmente en lo que va de 2021 contra activistas, artistas y periodistas independientes de la sociedad civil cubana, hacen difícil evaluar de "manera positiva" la implementación del tratado.
Bruguera en Ginebra
Este martes también tuvo lugar una sesión de la Cumbre de Ginebra para los Derechos Humanos y la Democracia, en la que pudo participar la artivista Tania Bruguera.
Luego de sufrir un corte a sus servicios de internet el lunes, Bruguera logró enviar al evento un audio donde dejó claro que "el gobierno cubano es una dictadura militar", apoyado en numerosas fuerzas represivas, como los órganos de la Seguridad del Estado (SE), la policía y otros.
"Imagina que vas caminando por la calle con una amiga", contó la artivista al comienzo de su intervención, "y de pronto un carro particular se detiene, salen cuatro personas vestidas de civil y te entran a la fuerza, sin explicación alguna. Ahí entiendes que se trata de la seguridad del estado. Llegas a una estación de policía donde te desnudan y te interrogan sin antes leerte tus derechos, no te permiten hacer una llamada y nadie sabe de tu paradero. Imagínate que eres uno de los 170 presos políticos que existen en Cuba hoy".
Así, a través de testimonios personales y de los seguidos gracias a la difusión de la prensa independiente y el trabajo de los activistas, Bruguera logró hilvanar un discurso que dejó al desnudo el verdadero rostro de la dictadura y el peligro que representa expresarse libremente en la isla.
"Imagina ver en el noticiero tu correspondencia privada descontextualizada, editada, manipulada, interpretada de manera tal que sirva a una narrativa que no tiene nada que ver ni con tus intenciones ni con tus acciones ni con tu forma de pensar. Imagínense siendo el foco de odio de un gobierno que ha perdido su legitimidad e intenta sostenerse creando una falsa sensación de peligro ante personas que en realidad sólo reclaman sus derechos más elementales", afirmó en alusión a su propio caso y al de decenas de disidentes cubanos.
Imagina que eres mujer y te viola un policía o te asesina tu pareja y ni siquiera eres considerada una estadística de feminicidio.
La reconocida artivista, uno de los blancos de ataque frecuentes de las campañas de difamación de la prensa estatal y de la SE, convidó a los oyentes de la Cumbre a situarse en la piel de los que sufren en Cuba por disentir, principalmente cuando se trata de los grupos sobre los que la violencia es más discriminatoria.
"Imagina que eres negro y pobre y te mata un policía con un disparo por la espalda. Y el gobierno justifica este acto culpando al asesinado porque se dio a la fuga. Imagina que la policía vuelve a matar a otro joven negro y pobre y quien ose denunciar y manifestar este hecho en público es llevado preso. Imagina que eres mujer y te viola un policía o te asesina tu pareja y ni siquiera eres considerada una estadística de feminicidio. Imagina que eres de la comunidad LGBTIQ+ y sólo si te asocias a la organización dirigida por la hija del ex-presidente del país eres reconocido y escuchado. Imagina que eres activista fuera de la sombra de la institución y por eso eres considerado un no-ciudadano, alguien sin derechos", declaró.
Cortes de internet, mensajes de odio, espionaje, reclusión domiciliaria, arrestos arbitrarios, torturas, difamación, prisión provisional y condenas, fueron algunas de las violaciones de derechos humanos en Cuba que denunció la directora del Instituto Internacional de Artivismo Hannah Arendt (INSTAR).
"El gobierno cubano es hoy una caricatura post-irónica, pero no nos confundamos, el gobierno cubano es una dictadura militar en el uso más estricto de la palabra".
"El gobierno cubano es hoy una caricatura post-irónica, pero no nos confundamos, el gobierno cubano es una dictadura militar en el uso más estricto de la palabra. Y ante eso el pueblo ha cambiado la consigna impuesta por el Estado: Patria o Muerte por su anhelo más profundo que es Patria y Vida, porque el cubano quiere vivir y vivir con dignidad... mientras mando esta grabación pienso en mis compañeros activistas presos, en las posibles consecuencias de participar en este tipo de evento, en la vulnerabilidad que sentimos a diario, pero hay algo que me da fuerzas porque sé que es un grito colectivo: Patria y Vida", concluyó.
La Cumbre de Ginebra se celebra habitualmente en vísperas de la principal sesión anual del Consejo de DD.HH. de las Naciones Unidas, y suelen asistir como invitados líderes mundiales a favor de la democracia, activistas, diplomáticos, periodistas y políticos opositores, además de las víctimas de violaciones de derechos humanos. Antes de Bruguera, por Cuba han alzado su voz en esos eventos los disidentes cubanos Guillermo “Coco” Fariñas (Premio Sajarov de Derechos Humanos en 2010), Rosa María Payá, líder de Cuba Decide, y el ex preso político Néstor Rodríguez Lobaina, fundador del Centro de Estudios Alternativos del Movimiento de la Juventud Cubana por la Democracia.