Allende noche fría, sin contacto
que tanto vidrio universal imanta,
hay un vacío colosal que espanta
y cualquier infinito es inexacto,
me vacío mis aguas por el cacto
de secaos y piedras que diamanta,
en donde canta la paloma y canta
la corriente del río, más exacto,
y la moza cerril carga su cesta
la madura eclosión de la floresta,
y canta el gallo de la madrugada…
allí me encontrarás (sonriente gozo),
mirando en lo profundo de mi pozo
estrellas de la noche constelada.
(Mayo, 2021)
Del libro Desde el cósmico umbral de la memoria (Ediciones Deslinde, Madrid, 2021).