"Ya salió mi sentencia. 5 años de limitación de libertad. Es en la casa, trabajando o estudiando. Me felicito. Muchas gracias a todxs por su gran ayuda", escribió Abel Lescay, joven músico y participante en las protestas del 11 de julio de 2021 (#11J), al conocer esta tarde la decisión del Tribunal Provincial Popular de Mayabeque.
Condenado desde comienzos de 2022 a pasar seis años en la cárcel, acusado de "desacato agravado de carácter continuado, desórdenes públicos y desacato de figura simple de carácter continuado" por improvisar un rap contestatario en la vía pública, el joven de Bejucal consiguió convencer a los jueves del Supremo en un juicio de apelación efectuado el pasado 1 de junio.
Hace una semana, y tras la apelación, Lescay fue expulsado definitivamente de la Universidad de las Artes (ISA), donde estudiaba la especialidad de música.
Sin embargo, su causa inspiró la creación del movimiento cívico #FreeAbelLescay, con cartas dirigidas a las instituciones del país y firmadas por centenares de personas solidarizadas con el artista manifestante del 11J.
La estrategia del cambio de sentencia luego de un largo proceso por parte de los acusados y presos políticos ha sido seguida por el régimen cubano en los últimos meses, específicamente a partir de abril de este año y en los casos de jóvenes y menores de edad.
Durante su apelación, la madre del joven, Isel María Lescay, contó que en el juicio de apelación su hijo reconoció "que se había excedido, que había actuado mal, que no estaba bien ofender a las personas de palabra en la calle, mucho menos a un policía. Pero que lo que había hecho era un rap, que forma parte de las cosas que él estudia y que los rap son así. Que requieren cierta marginalidad".
Por su parte, Ernesto González, padre del joven, dijo que están "a la espera de la respuesta del rector para discutir con él la desatinada decisión de sacarlo del ISA".
La noticia del cambio de medida fue tomada con beneplácito por miembros destacados de la sociedad civil cubana, que llenaron de comentarios el Facebook del joven. "Abel, en realidad es un desperdicio que salgas a la calle... Y ahora tu casa será sitio de culto. Crea! El falso dios del susto no ha podido contigo. Aleluya!", comentó el escritor Rafael Almanza, en alusión al poemario inédito de Lescay "Cuatro encuentros con el dios del susto".
"Ni tú, ni ninguno de los manifestantes de las protestas de julio debió de ser juzgado. Esos mal llamados jueces no tienen autoridad para limitar en ningún grado la libertad que de manifestación que les pertenece. Yo reivindico el derecho de los pueblos a la rebeldía ante un poder opresor, y te abrazo fuerte. No estás solo. La ficción totalitaria no aguanta", consideró la activista e historiadora de arte Carolina Barrero.
Mientras que, para el escritor Julio César Guanche la medida "no le quita injusticia, pero que estés en la casa es una gran noticia".
Abel Lescay declaró que se concentrará en su trabajo, cuya meta inmediata es la producción del disco Grillos ("música para todas las voces que tejen el presente"), lanzado en un crowdfunding de la plataforma Verkami, en el que restan tres días para cerrar.