Irse de Cuba es una evolución lógica para la artivista Lía Villares. Ser independiente económica y mentalmente significa, para ella, la manera de sacarse la dictadura de arriba.
Su arte y sus ideas se mueven por un campo minado: "el contexto cubano no es transparente, nunca lo ha sido, el contexto en el totalitarismo cubano no es un espacio abierto".