"...Ya no sueñas Quijotes / ni tu muela se escucha / desde el trigo. / Ya no tienes ni sueños, / y si acaso tuvieras, / soñarías cilíndricos momentos...".

"No quiero ser piedra que llore, / ni piedra que lastime una mirada, / ni canto que desgarre una canción / ni mano que despiece un corazón...".

"Era hermosa la noche y, plateaba / sobre el índico azul de aquel ensueño / y mi cuerpo, tan dúctil y abrileño / alumbraba la luz, Dios, alumbraba".

"...En el negro de la falla / del rincón / el silencio dio batalla / y gritó. / Y tu yo no dijo nada....".

"Los pájaros son el recuerdo cotidiano / de la atadura que nos une a la tierra / diariamente..."

"Hay pájaros, averío / de unas almas que, gemelas / cruzan el cielo y las velas / con sus alas y amorío...".

"Qué piensas, Don Quijote, si los libros / te inspiran aventura y compañía..."

"La eternidad habita en el abrazo, / cabe toda en la música / que se mide en minutos / y es siempre más pequeña / que la pista de baile".

"Fue tan imprescindible la figura / de Sancho en el Quijote, si leemos / la obra tan insigne, si caemos / en cuenta de su afán y su postura".

"La oscuridad del cuarto me abrazó por la espalda. / Los antiguos ojos de una estrella / que clavaba su vértigo / en la más vertical de las alturas".

“Quijote, como Quijano / le llaman por todo el orbe / y que a nadie se le estorbe / que fue su apellido sano”.