Con varios arrestos y vigilancia policial contra miembros de la sociedad civil cubana transcurrió la jornada de este viernes 12 de marzo en La Habana, según reportes publicados en redes sociales y la denuncia de los implicados.
La reportera de Cubanet, María Matienzo y el periodista independiente Héctor Luis Valdés Cocho, fueron los primeros detenidos al intentar salir de sus viviendas, en las que la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) y la Seguridad del Estado (SE) habían montado sendos operativos de vigilancia.
“Yo soy periodista independiente y voy a cubrir la noticia que entienda que tengo que cubrir. Mi casa no es un calabozo. Así que, a partir de ahora, cada vez que me pongan vigilancia, voy a ir presa”, dijo en una directa en Facebook Matienzo una vez liberada.
Según los periodistas detenidos, el estado policial en el que amaneció la capital cubana este viernes pudiera estar vinculado al supuesto plan de rebelión denunciado en la emisión del jueves del Noticiero de la Televisión Cubana, por el periodista oficialista Humberto López.
En su intervención, López, luego de presentar el caso de Luis Robles, detenido y condenado por las autoridades cubanas por protestar pacíficamente en una calle habanera, se lanzó a advertir de una presunta congregación de opositores, activistas y periodistas independientes, que debía tener lugar en la Plaza de la Revolución.
“¡Lo dije ayer y lo sostengo hoy! ¿Querían Plaza? Pues de mi parte tendrán Plaza. Yo saldré. Tengo cosas que hacer y no me da la gana de seguir bajando la cabeza cuando ustedes me dicen que no puedo salir”, escribió en Facebook Valdés Cocho, minutos antes de salir y ser detenido.
También detenidos en las mismas circunstancias, tras la vigilancia de la policía y la Seguridad del Estado, se registraron los nombres de Maykel Castillo (Osorbo), Abu Duyanah Tamayo, Humberto Mena, Mildys Salcedo y Yeris Curbelo, según denunció en redes sociales el propio Valdés Cocho, luego de ser liberado.
La periodista de 14ymedio, Luz Escobar, la periodista de Cubanet, Camila Acosta, el científico Oscar Casanella, el artista Luis Manuel Otero Alcántara y el activista Osmani Pardo reportaron igualmente operativos en los alrededores de sus viviendas.
Otros casos significativos fueron los de la historiadora de arte Carolina Barrero, la periodista de CiberCuba, Iliana Hernández y la escritora Katherine Bisquet, desaparecidas por las fuerzas represivas sin que se supiera de sus paraderos durante horas.
Barrero había posteado en su perfil en Facebook que saldría a la calle en solidaridad con el preso político Luis Robles, y poco después se perdió todo contacto con ella, según denunció Anamely Ramos.
Sobre las ocho de la noche fue liberada y se supo que fue conducida a la unidad policial de Santiago de Las Vegas, en el extremo oeste de la ciudad, donde la interrogó la Teniente Coronel Kenia Morales Larrea, instructora del proceso penal por delito de Clandestinidad de Impresos, quien le recordó el proceso penal en marcha contra su persona.
"Si por sostener y defender estos principios quieren acusarme y procesarme que lo hagan, yo voy a salir siempre", escribió Carolina en su testimonio publicado en redes sociales.
La desaparición de Bisquet fue denunciada de manera similar por Camila Lobón, al habla con la escritora antes de que esta saliera a la calle y no respondiera más el teléfono. Poco después Katherine apareció en una directa del Instituto Internacional de Artivismo 'Hannah Arendt', donde explicó la detención de la Seguridad del Estado.
Por su parte, Hernández trasmitió en vivo desde un automóvil particular cuando fue interceptada por policías y militares en plena carretera. Fue liberada en las cercanías de la Villa Panamericana.
También este viernes, a las 11 de la mañana, tuvo lugar el interrogatorio de la Seguridad del Estado al periodista Yoe Suárez, en la estación policial ubicada en Calle 110 y Avenida 3ra, en el municipio habanero de Playa. Esta es la duodécima citación en menos de un año que recibe Suárez o algún miembro de su familia, y cuando hace apenas una semana fue interrogada su esposa, la también periodista María Antonieta Colunga Olivera. En el encuentro los agentes del régimen redundaron en viejas amenazas y en el intento de persuadir a Yoe de hacer su trabajo en medios independientes como Diario de Cuba o La Hora de Cuba, según contó el periodista en una transmisión desde el perfil en Facebook de este último.